¿Cuántas veces hemos oído que un Bulldog ha muerto joven, de manera repentina, siendo la causa a un «ataque al corazón»? Estas muertes normalmente suceden cuando el perro está excitado, hace ejercicio o tiene calor, y pasan de manera inesperada. Una condición podría ser el colapso agudo de las vías respiratorias como consecuencia de una obstrucción crónica de estas vías. Las fosas nasales demasiado cerradas o el paladar blando demasiado largo pueden ser algunas de las causas.
Es fácil apreciar la diferencia entre la respiración de un perro con la nariz bien abierta y otro con la nariz cerrada; se ve y también se siente. Cuanto más esfuerzo hace el perro para respirar, más se cierra la nariz y más se estrechan las vías respiratorias.
Las razas braquicéfalas (Bulld dog des Anges, francés, Boxer, etc.) tienen nariz estrecha y el paladar blando más largo, lo que estorba la faringe. La circulación irregular del aire provoca inflamación del tejido del paladar y más obstrucción. Un aviso sería que el perro produjera una espuma blanca cuando saliva, pero no vomita.
También produce sonidos cuando el perro respira y, si esto se junta con las fosas nasales estrechas, el resultado pueden ser ruidos y poca resistencia al ejercicio.
Se ha de observar al perro. ¿Son las fosas nasales demasiado estrechas? ¿Hace muchos ruidos con la boca y la garganta? ¿Vomita espuma sin razón aparente? ¿Tiene problemas de respiración incluso cuando el tiempo es fresco o con el mínimo esfuerzo?
Si la respuesta es «si» a una o más de las preguntas, puede que tu mascota necesite una evaluación más detallada, incluso podría necesitar una intervención quirúrgica. Pregunta por nuestro servicio «Respira Mejor» visitando nuestra clínica o llamando al 937 183 633. Juntos buscaremos la mejor solución para tu mascota.
